Hace décadas las casas se construían con materiales toscos, fríos, y poco estéticos. Con el paso del tiempo y gracias a las numerosas investigaciones que se han realizado en el campo de la construcción, hoy en día, los edificios se construyen con materiales mucho más ligeros, con un mayor componente estético y sobre todo, materiales mucho más aislantes.
Desde pinturas plastificadas que evitan la aparición de humedades en las paredes, pasando por fachadas ventiladas que dejan “respirar” al edificio, o infinidad de materiales fabricados con materiales reciclados.
Uno de los puntos más importantes en un edificio son las ventanas, son los puntos de entradas de luz, de aire, … cuanto más grandes, más luz y ventilación, con lo que mayor calidad de vida. Pero las ventanas también permiten la difusión de calor (desde el interior al exterior y viceversa).
Con el avance tecnológico, se ha innovado en los materiales empleados en la fabricación de ventanas, desde ventanas de hierro y con un vidrio monolítico, hasta ventanas de PVC y vidrios de cámara bajo emisivo. Con las ventanas de PVC Kommerling y un vidrio de cámara bajo emisivo se consigue ahorrar hasta un 70% de energía en el hogar, tanto en verano como en invierno. Además su infinidad de acabados permiten su colocación en todo tipo de hogares, desde las casas más rústicas con perfiles Kommerling foliados imitación madera, hasta en hogares más modernos con perfiles Kommerling foliados plata o diferentes colores.
Por que mejorar la calidad de una vivienda y el ahorro energético se pueden conseguir de muchas formas. Una de ellas con ventanas de PVC Top-quality Windows y un vidrio Sunguard.